En memoria de Cecil Helman

Resumen

La Antropología Médica y la Medicina Familiar brasileña han perdido una referencia importante con el fallecimiento precoz de Cecil Helman, a los 65 años de edad.

Nascido en África del Sur, en una familia de médicos, se recibió de medico en aquél país, migrando luego después para Inglaterra, donde trabajó como General Practitioner vinculado al National Health Service (NHS) por 30 años.

Desde temprano, se interesó por la antropología médica, realizando una sólida for­mación académica y asumiendo una posición de liderazgo mundial en el área, pionero reconocido a través de importantes premios.

Helman era un apasionado por Brasil y ejerció gran influencia en la antropología médica brasileña, especialmente a partir de su principal libro “Cultura, Salud y Enfer­medades”, publicado en 1984 -la primera edición brasileña se publicó diez años des­pués. Con seguridad, está es su obra más conocida, con traducciones en varios idiomas y que llegó a su 5ª edición brasileña en 2009. Es en este libro que el autor escudriña la relación de los aspectos culturales como el proceso salud-enfermedad, conceptos funda­mentales para una práctica en salud que se pretenda efectiva y culturalmente sensible.

Una característica que marcó su carrera fue la facilidad de transitar, como pocos, en­tre la antropología médica y la práctica médica, logrando establecer una ligación entre eses dos campos del conocimiento y apuntando, con claridad, su complementariedad. Eso explica como él ha permanecido actuando de forma tan extraordinaria en estas dos áreas por tanto tiempo, aplicando lo que llamaba de “antropología médica clínicamente aplicada.”

Esa característica quedó marcada también en su libro, que buscaba siempre expli­citar esa relación a través de numerosos ejemplos. Aunque con contenido profundo, fue escrito para proporcionar una lectura agradable, siendo adoptado como referencia bibliográfica por numerosos cursos teóricos y contribuido para hacer la antropología médica más accesible a los profesionales de salud. Por otro lado, consigue igualmente mostrar la complejidad de la práctica en salud también a los profesionales oriundos de las ciencias sociales.

Helman no se acomodaba. Cada edición del libro contenía nuevos capítulos, indi­cando la necesidad de estar en sintonía con lo que pasaba en su alrededor y con los cam-bios constantes del mundo actual. Eso explica, por ejemplo, la inclusión, en la última edición, de los capítulos sobre migración, telemedicina e internet.

Helman estuvo varias veces en Brasil, país que admiraba por la diversidad cultural y por el rico trabajo desarrollado por los médicos familiares junto a la población. Par­ticipó de diversos eventos de nuestra especialidad y desarrolló proyectos de pesquisa, habiendo hecho varios amigos. Extremamente cordial y con una voz mansa, siempre se mostraba curioso en oír la exuberancia de aspectos culturales presentado por el público en sus palestras.

Su último libro, The Suburban Shaman (publicado en 2004 y sin traducción a portu­gués) es un fantástico relato semi-biográfico de casos atendidos por él en su trayectoria profesional. Coherentemente con la idea defendida por Helman, de que el “arte médica es un arte literaria”, el libro reúne excelentes ejemplos de la esencia de la práctica del médico familiar, es decir, lograr una comunicación adecuada con el paciente, simple-mente conseguir oírlo en su plenitud.

Su obra evidencia, de modo contundente, que la comprensión de la “narrativa” de cada ser humano debajo los nuestros cuidados es los que torna posible ponerse en la posición del paciente y entender su historia, su cultura, y sus “personajes”, el contexto en que estamos inseridos y lo cuanto ese conjunto es importante en las cuestiones rela­cionadas a la salud y la enfermedad.